El caso de "Camila", una niña peruana, quechua hablante, que fue ultrajada por su propio padre desde los nueve años de edad, hasta dejarla embarazada, llegó hasta el Comité de los Derechos del Niño de Naciones Unidas.

El organismo internacional concluyó que las autoridades de peruanas vulneraron los derechos a la salud y la vida de la niña, al no proporcionarle información ni acceso al aborto legal y seguro.

Además, la niña fue acusada y condenada por autoaborto, sin pruebas; por ello consideran que, Camila fue "objeto de discriminación por motivos de edad, género, origen étnico y condición social". El Comité subrayó que, lejos de ser protegida por su "extrema vulnerabilidad", la niña fue "revictimizada y acosada por las autoridades sanitarias, policiales y judiciales".

El caso: 

De acuerdo a la información recaudada, Camila (nombre ficticio) quedó embarazada en 2017 y desde su primera consulta en un hospital de Abancay hizo constar en reiteradas ocasiones que no quería continuar con el embarazo, pero no recibió información sobre las alternativas disponibles.

Con la ayuda de una ONG, Camila inició los trámites para acceder al aborto terapéutico conforme a la legislación nacional. Asimismo, presentó una solicitud de interrupción voluntaria del embarazo ante la fiscal encargada de la investigación penal por violación para que le asignaran un centro de salud en el que pudieran valorar su caso. Sin embargo, no obtuvo respuesta ni del hospital ni de las autoridades judiciales.

Asimismo, el personal médico presionó a la niña para que continuara con el embarazo, llegando a presentarse en su casa con la Policía cuando esta no acudía a los controles prenatales.

Tras un aborto natural, Camila fue acusada y condenada por autoaborto, sin pruebas.

Este caso ha llevado al Comité a pedir a Perú que despenalice el aborto en todos los casos de embarazo infantil, que garantizara el acceso de las niñas embarazadas a servicios de aborto seguro y atención postaborto, sobre todo en casos riesgo para la vida y la salud de la madre, incesto o violación. También han solicitado que se modifique la normativa que regula el acceso al aborto terapéutico para prever su aplicación específica a las niñas.

Fuente: Naciones Unidas 

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