La creatividad de muchos médicos y enfermeras del Instituto Nacional de Salud del Niño (INSN) de San Borja-Lima, ha logrado que la quimioterapia para muchos  niños sea más alegre. Los diversos menores que llegan de diferentes departamentos del país, mientras reciben su tratamiento intravenoso, donde deben ser valientes para enfrentar el dolor de las agujas, andan en triciclos para soportar este proceso doloroso.

Este triciclo está especialmente adaptado para portar el suero y las cajas de quimioterapia mientras ellos lo manejan, este proyecto esta denominado “Sanando sobre ruedas” y lo logró el INSN con apoyo de la Asociación Civil “Proyectos de amor”.

El director del nosocomio, Ricardo Zopfi, agradeció el gesto de dicha asociación, liderado por Wendy Bedoya y destacó que en el Instituto siguen consolidando el lema de “Humanizar para sanar” es la forma de recuperar a nuestros pequeños pacientes, considerando que más del 80% de ellos provienen del interior del país.

En el marco de su política de humanización, este centro pediátrico promueve esta nueva estrategia en busca de brindar una atención especial, bienestar personal y emocional a sus pequeños pacientes, quienes tendrán un espacio para superar el temor y la ansiedad durante su tratamiento médico.

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